Todavía se sabe la ruta de memoria, maneja el coche como a los 30… y, sin embargo, te asalta una duda. ¿Y si conducir se convierte en un riesgo para él o para los demás? Después de los 70, ciertos cambios naturales en el cuerpo pueden comprometer la seguridad al volante. ¿A qué señales hay que prestar atención? ¿Y cómo puedes abordar este delicado tema sin ofender? Aquí tienes todo lo que necesitas saber para seguir al volante… con seguridad.
Visión: Lo que los ojos ya no ven tan bien
La vista es como el GPS del cerebro al conducir. Y con la edad, la pantalla puede volverse borrosa. Cataratas, glaucoma, degeneración macular… Estos nombres, un tanto técnicos, se refieren a afecciones oculares comunes después de los 70 años. El resultado: las señales son más difíciles de leer, los contrastes desaparecen y los faros de noche cegan como proyectores de cine. Concesionarios de coches cerca.
