Los alimentos ricos en potasio, como los plátanos, las espinacas, los aguacates y las patatas, pueden ayudar a equilibrar los niveles de sodio en el cuerpo y a reducir la retención de líquidos.

4. Evita los alimentos ricos en carbohidratos refinados:
Los alimentos ricos en carbohidratos refinados, como los productos horneados, la pasta y los dulces, pueden provocar retención de líquidos. Opta por carbohidratos complejos como los cereales integrales, las verduras y las frutas.

5. Haz ejercicio con regularidad: El ejercicio físico puede ayudar a estimular la circulación sanguínea y linfática, lo que favorece la eliminación de líquidos y toxinas del cuerpo. Intenta realizar al menos 30 minutos de ejercicio moderado cada día.

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