Las grietas en los talones, también llamadas fisuras en los talones, son un problema común que puede causar molestias físicas y vergüenza. Si bien es frecuente sentir sequedad leve en los pies, la sequedad severa puede provocar que la piel de los talones se agriete, formando fisuras dolorosas. Además de ser un problema estético, las fisuras en los talones sin tratar pueden causar infecciones y complicaciones más graves.

La mayoría de las personas recurren inicialmente a lociones o cremas hidratantes para aliviar las grietas en los talones. Sin embargo, estos tratamientos no siempre funcionan para todos. Si has estado aplicando loción regularmente sin mejoría, quizás sea momento de explorar otros remedios o consultar con un médico.

1. Causas de las grietas en los talones

Las grietas en los talones se desarrollan cuando la piel gruesa de esta zona se reseca en exceso y pierde elasticidad. La presión constante al estar de pie o caminar puede provocar que esta piel seca se agriete aún más. Debido a que la piel del talón es naturalmente más gruesa que la del resto del cuerpo, es especialmente propensa a agrietarse cuando se deshidrata o se endurece.

En los casos más graves, estas grietas pueden profundizarse, causando sangrado, dolor e incluso infección. Tratar las causas subyacentes a tiempo es fundamental para prevenir daños mayores y favorecer la cicatrización.

2. Causas comunes de los talones agrietados

Varios factores contribuyen a la aparición de talones agrietados:

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