Entonces, ¿por qué hacen esto?
Para cualquiera que haya tenido un perro, no es de extrañar que se comuniquen y saluden de diversas maneras, y su sentido del olfato juega un papel crucial. Los perros exploran el mundo con su nariz, y sus hábitos de olfateo les permiten recopilar información importante.
El olfato superior de un perro proviene de los 220 millones de receptores olfativos de su nariz. Esto es aproximadamente 50 veces más que los humanos, lo que les da la capacidad de detectar olores que son completamente indetectables para nosotros.
En resumen, los perros son criaturas increíblemente curiosas y tienen un olfato muy agudo que les ayuda a recopilar información sobre ti.
Los perros se sienten atraídos por los olores fuertes, explica Jennifer Sperry, veterinaria de Pets Plus Us Insurance, a Rover.com. La ingle, con sus glándulas sudoríparas y su aroma único, es como una alfombra acogedora para la nariz de un perro. Para perros medianos y grandes, la entrepierna también es fácilmente accesible, para gran disgusto de tus visitas.
Afortunadamente, existen maneras de redirigir la curiosidad de tu perro hacia una bienvenida más cortés. Sigue leyendo para descubrir por qué los perros te huelen la entrepierna y cómo puedes reorientar este comportamiento.
¿Por qué mi perro me huele la entrepierna?
¿Alguna vez te has preguntado por qué tu perro no puede resistirse a olerte la entrepierna? Según Rover, hay algunas razones clave para este comportamiento que podrían sorprenderte.
Primero, ¡la altura es ideal para un buen olfateo! Pero no se trata solo de comodidad: la entrepierna también tiene una característica única que la convierte en un punto de interés para los perros.
