4 pechugas de pollo sin piel
2 cucharadas de mayonesa
2 cucharadas de yogur natural o griego
1 diente de ajo finamente picado
1 cucharadita de mostaza Dijon
½ cucharadita de pimentón dulce o ahumado
½ cucharadita de sal
¼ cucharadita de pimienta negra recién molida
50 g de queso parmesano rallado
Unas ramas de romero fresco (opcional)
Estos ingredientes crean un equilibrio perfecto entre cremosidad, suavidad y un ligero toque crujiente gracias al queso.
Preparación paso a paso
1. Preparar la mezcla cremosa
En un bol mezcla la mayonesa, el yogur, el ajo, la mostaza y las especias. Remueve con una cuchara hasta obtener una textura suave y homogénea. Esta crema es el secreto que mantendrá la carne jugosa.
2. Sazonar el pollo
Coloca las pechugas en una bandeja apta para horno. Unta cada pieza con la mezcla cremosa, cubriendo bien por ambos lados. Esto asegurará que cada bocado sea tierno y lleno de sabor.
3. Añadir el queso parmesano
Espolvorea el parmesano sobre la parte superior de cada pechuga. Este paso creará una capa dorada y ligeramente crujiente.
4. Hornear con paciencia
Precalienta el horno a 190 °C. Introduce la bandeja y cocina entre 25 y 30 minutos. Evita hornear demasiado para no resecar la carne.
5. Servir y disfrutar
Una vez listo, deja reposar el pollo unos minutos antes de servir. Esto ayuda a que los jugos se asienten. Acompáñalo con ensalada fresca, puré de patatas o arroz blanco.
