Te cuidas a diario, mantienes una buena higiene… y, sin embargo, a veces notas un olor inusual, ligeramente agrio, que te hace fruncir el ceño. No te preocupes: no estás solo/a, y no es anormal. Pero, ¿de dónde viene realmente esta incomodidad y, sobre todo, cómo puedes deshacerte de ella con suavidad? Analicémoslo juntos con más detalle, sin tapujos.
Una dieta excesivamente rica puede alterar tu equilibrio íntimo.
Es importante recordar que lo que comes afecta a todo tu cuerpo, incluyendo tus zonas más íntimas. Algunos alimentos muy picantes, ricos en ajo o cebolla, e incluso algunos quesos picantes, pueden dejar un ligero olor vaginal temporal. No te preocupes: este olor suele desaparecer una vez que tu dieta se vuelve más equilibrada. Mientras tanto, recuerda beber mucha agua para ayudar a eliminar toxinas.

La causa puede ser un desequilibrio en la flora bacteriana vaginal.

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