Ingredientes:
4 huevos
2 tazas de azúcar
2 cucharadas soperas de harina de trigo
2 tazas de leche
1 paquete de queso rallado (100 gramos)
1 paquete de coco rallado (100 gramos)
1 cucharada sopera de margarina
Cómo hacer Pastel de “Queijadinha” paso a paso
Preparar la licuadora: Primero, asegúrate de que tu licuadora esté limpia y lista. Esto hará que el proceso sea aún más fácil.
Añadir los ingredientes: En la licuadora, agrega los 4 huevos, el queso rallado, el coco rallado, la leche, el azúcar, la harina de trigo y la margarina.
Licuar: Licúa a una velocidad alta hasta obtener una mezcla lisa y homogénea. ¡La mezcla debe verse espectacular!
Preparar el molde: Vierte la masa en un molde de 20 cm de diámetro que previamente has caramelizado. Si nunca has caramelizado un molde, ¡es muy fácil! Solo derrite un poco de azúcar en una sartén hasta que tome un color dorado y viértelo en el molde, asegurándote de cubrir el fondo y los lados.
Hornear: Lleva el molde al horno precalentado a 180 °C y hornea durante aproximadamente 30 minutos. Esté atento a que esté bien dorado y firme al tacto.
Enfriar y desmoldar: Una vez listo, retira del horno, deja enfriar un poco y desmolda con cuidado.
¡Listo para servir!: Sirve frío para disfrutar de toda su textura cremosa con el delicioso toque del coco y el queso.
Tips para hacer Pastel de “Queijadinha” mejor
Añade un toque extra: Considera añadir un poco de canela o nuez moscada a la mezcla para darle un sabor cálido y acogedor. ¡O incluso un puñado de nueces o almendras picadas para un toque crujiente!
Cuidado con el azúcar: Si prefieres un pastel menos dulce, puedes reducir ligeramente la cantidad de azúcar.
Intenta con otros quesos: Experimenta con diferentes tipos de quesos que te gusten; algunos pueden aportar un sabor especial que te sorprenderá.
Cómo servir Pastel de “Queijadinha”
Te recomiendo servirlo bien frío, tal vez con una cucharada de crema batida o helado a un lado. ¡Una presentación elegante siempre suma puntos! Puedes adornar con un poco más de coco rallado por encima o unas rodajas de fruta fresca como mango o piña. ¡Delicioso!
