Una invitación a detenerse y respirar
. Quizás el cielo no esté enviando mensajes secretos. Quizás sea solo un juego de luces. Pero piensa: ¿cuándo fue la última vez que miraste hacia arriba y te fijaste de verdad?
Estos momentos nos sirven como valiosos recordatorios. Pausas que nos invitan a apagar nuestros teléfonos, respirar hondo y reconectar con el presente.
Dato curioso:
Existe un nombre científico para esta tendencia a ver formas familiares en objetos o paisajes: pareidolia. Es el mismo fenómeno que nos hace ver rostros en las nubes o siluetas en la luna.
Preguntas frecuentes:
¿Podría esta foto ser prueba de algo sobrenatural?
No hay evidencia de ello. Probablemente se trate de un fenómeno óptico, pero la interpretación sigue abierta.
