Aunque lo ideal es obtenerlo de la alimentación, hay situaciones en las que puede ser necesario recurrir a suplementos, como:
Problemas gastrointestinales que dificulten la absorción.
Deportistas o personas con alta sudoración.
Mujeres embarazadas o lactantes.
Adultos mayores.
Personas sometidas a estrés crónico o con poca calidad de sueño.
Los suplementos vienen en distintas formas (citrato, glicinato, cloruro, óxido, etc.), y cada una tiene diferente nivel de absorción. Siempre consulta a un médico antes de comenzar.
Dosis Diaria Recomendada
Las necesidades varían según edad y sexo:
Hombres adultos: 400–420 mg diarios
Mujeres adultas: 310–320 mg diarios
Mujeres embarazadas: 350–360 mg diarios
Adolescentes: 360–410 mg
Niños: 80–240 mg
