Los dos adolescentes enfrentan ahora varios cargos, como allanamiento de morada, vandalismo y robo. Aunque el caso aún no ha llegado a juicio, su futuro legal probablemente dependerá de muchos factores, entre ellos su corta edad.
Pero para muchos, la verdadera lección no vendrá de un tribunal. Se da aquí, en la decisión de los padres de decir: “No, lo que hiciste fue grave. Y tienes que asumirlo”.
Además, varios internautas han propuesto un castigo simbólico pero significativo: hacerles participar ellos mismos en la restauración de la biblioteca, para que se den cuenta plenamente del alcance de sus acciones.
Porque a veces amar a tu hijo también significa tener el coraje de decirle: “Tú eres responsable”.
