El último dígito del año en que naciste revela tu destino espiritual (y esto no es coincidencia en absoluto).

Tu lección es aprender a confiar y delegar.
2 — El alma que sana silenciosamente

Vibración de armonía y equilibrio.

Tu don es la capacidad de reconciliar y sanar.

La lección principal es aprender a cuidarse.

3 — La voz que ilumina

Energía de creatividad y autoexpresión.

Tu misión es inspirar a través del arte y la sinceridad.

Es importante tener dirección, no limitaciones.

4 — El alma creativa

Fuerza de estabilidad y cimentación interior.
Habéis venido a construir estructuras sostenibles.

Pero la dureza no significa inflexibilidad: es importante poder adaptarse.

5 — El espíritu libre

Energía de cambio y búsqueda de lo nuevo.

El desafío es mantener tu independencia sin perderte a ti mismo.

Las raíces no son una célula, sino un templo.