Preparación paso a paso:Preparación paso a paso:
1. Precalienta el horno:
A 170 °C (340 °F). También prepara un molde pequeño (tipo 18 cm) forrado con papel para hornear o ligeramente engrasado. Puedes hornear a baño maría para una textura más suave, pero no es obligatorio.
2. Bate las claras:
En un bowl limpio, bate las claras con la pizca de sal y unas gotas de limón hasta formar picos firmes (como si fueras a hacer merengue). Reserva.
3. Mezcla los ingredientes base:
En otro bowl, mezcla el queso crema, las yemas y la leche condensada hasta obtener una crema lisa y sin grumos. Puedes usar batidor de mano o licuadora.
4. Incorpora las claras en forma envolvente:
Agrega las claras batidas a la mezcla de queso poco a poco, con movimientos suaves y envolventes, para que no se baje el aire.
5. Hornear:
Vierte la mezcla en el molde y hornea por 35-40 minutos o hasta que al mover el molde, el centro apenas se mueva y esté ligeramente dorado.
(Opción rápida: puedes también cocinarla en microondas a potencia media-alta por 3 a 5 minutos en un molde apto para microondas. ¡Haz pruebas con tu micro!)
6. Enfriar y disfrutar:
Deja enfriar completamente y refrigera mínimo 1 hora para que tome buena textura. Puedes espolvorear con azúcar glas, decorar con frutas, miel o mermelada si lo deseas.
Resultado final:
Una tarta ligera, sin harina, con ese saborcito suave del queso crema y la dulzura justa de la leche condensada. ¡Un postre que se hace en minutos y conquista siempre!
